La internacionalización es una prioridad del proyecto. La coyuntura actual demanda planteamientos localmente formulados, sí, pero con una proyección global. En respuesta a esta exigencia política, social y científica, el equipo de trabajo incorpora a un abanico de prestigiosos investigadores de universidades extranjeras. Participarán éstos en las actividades proyectadas y actuarán como nodos difusores de los resultados a escala internacional. Las conexiones que se generarán a través de su cooperación podrán servir para la creación de redes de investigación internacionales que, eventualmente, podrían dar lugar a la obtención de financiación fuera de nuestras fronteras.

Entre los miembros que componen el equipo se encuentra uno de los mejores especialistas de la era de las revoluciones (P. Serna, universidad Paris I-Panthéon Sorbonne); un experto en el estudio de las redes de la Ilustración europea (Pierre-Yves Beaurepaire, universidad Côte d’Azur); Anne Dubet, de la universidad Clermont-Auvergne, que investiga las estructuras institucionales del reformismo borbónico; dos investigadores de la universidad Bordeaux-Montaigne (Michel Figeac, Guillaume Hanotin), que previamente han cooperado con el equipo de investigación; el profesor James Brophy, de la universidad de Delaware, que aportará sus conocimientos sobre la formación de la esfera pública popular a finales del Antiguo Régimen; el profesor Jesús Cruz, también de la universidad de Delaware, cuyos trabajos han sido referencia para el equipo desde hace años; José Damiao Rodrigues, de la universidad de Lisboa, que estudia las reformas dieciochescas en el imperio portugués, o el grupo de profesores de universidades e institutos de investigación argentinos que conectan nuestros intereses locales con sus extensiones globales (Elsa Caula, Griselda Tarragó, Martín Gentinetta, Víctor Pereyra, Romina Zamora).